jueves, 9 de septiembre de 2010

SIMBOLOS

BANDERA


La bandera comprende tres colores: blanco, rojo y verde. Distribuidos en tres franjas Horizontales en las cuales, el blanco en la parte superior, tendrá un ancho igual a la mitad de la bandera y los otros dos colores en franjas iguales, a la cuarta parte del total, el color rojo en el centro, seguidamente verde. La explicación de la bandera y sus colores es el siguiente:

BLANCO: Símbolo de paz, esperanza, prosperidad y cultura de un futuro promisorio que anhelan todos los habitantes de esta región.

ROJO: La sangre que derramaron nuestros héroes en su lucha por la libertad, simbolizando a demás la energía del empeño en cada campesino que coloca en su trabajo, la herencia de sus antepasados y que es tarea para ser transmitida a las futuras generaciones.

VERDE: Simboliza las selvas vírgenes; sus pequeñas llanuras y riquezas forestales que rodean al municipio exaltando la fertilidad del suelo, tierra bendecida por Dios y que espera la mano del hombre Sácameño, que las va a trabajar para brindar con beneplácito sus mejores frutos para el sustento de su familia.

LA MEDIA LUNA Y LA ESTRELLA: Nos ilustra el espacio geográfico de nuestra región, los frutos de nuestra tierra, la riqueza humanística y la bondad de sus gentes. Las ochos puntas de la estrella significan la división geográfica del municipio en las respectivas veredas. En el centro de la estrella se encuentra la consonante “S”, símbolo del nombre adoptado por el municipio.


ESCUDO





Es la enmarcación de la patria a que todos pertenecemos por mandato de la soberanía de cada estado y de cada nación de este planeta. Basándose el autor en la reseña histórica del municipio desde su fundación hasta nuestros días. Se diseño el gran escudo y su significado es:

EL SOL: En la parte superior, como imagen de soberanía y de grandeza que deben tener todos los municipios del oriente llanero en pro del progreso social, cultural y educativo.
Dentro del sol se encuentra una estrella, la que nos recuerda el pasaje bíblico sobre la adoración de los reyes magos al niño Jesús, símbolo de salvación para el hombre actual.
De igual forma la luna nos ubica en el espacio geográfico de nuestro país, el cual esta ubicado en la zona tórrida, posición favorable para poseer diversos climas y por ende una riqueza en flora y fauna como ningún otro país en el mundo la posee.

LAS DOS ASTAS CRUZADAS; significan el valor y la fuerza de la raza llanera que ama el progreso, su tierra y sus ancestros históricos como en la batalla del pantano de Vargas, cuando el Coronel Juan José Rondón definió junto con catorce lanceros el triunfo de los patriotas por intermedio del grito del libertador “Simón Bolívar” que, dijo: “coronel salve usted la patria”.

EL ARBOL CENTRAL: nos exalta las riquezas forestales que posee el municipio y que es orgullo del hombre Sacameño, el poder brindar un lugar donde todavía se respire un aire puro sin contaminantes ambientales y que es tarea de todos los habitantes y de sus habitantes preservar este sitio, rincón olvidado de nuestra geografía Colombiana.

LA CABEZA DE GANADO: En la parte media ilustramos el renglón de la ganadería de la región, ya que contribuye a mantener un sitio privilegiado en el entorno económico de nuestro país.

EL MEDIO ARCO: En la parte inferior; símbolo de la agricultura del municipio. En honor a la fuerza del hombre campesino que se arraiga a la madre tierra por extraer los frutos para el sustento de su familia y contribuir a engrandecer la economía de nuestro país.

EL EMBLEMA “CAMINO DE PROGRESO Y PATRIA”, significa el esfuerzo de todos los estamentos sociales de contribuir al progreso del municipio en pro del beneficio colectivo de sus gentes (niñez, juventud), cuya meta es formar hombres de bien para que sean útiles a la sociedad de su país y patria que los vio nacer.

EL ENTORNO DEL ESCUDO: Significa la división política, dentro del contexto Socio-económico y político del departamento del Casanare.

HISTORIA



Los primeros indicios que se tienen de Sácama se refieren al año de 1524, época en que los conquistadores Jorge Spira y Nicolás de Federmán pisaron territorio de lo que hoy es Sácama, poblado en aquella época por un grupo indígena llamado Rubacates, perteneciente a la familia lingüística Chibcha, a la subfamilia de los Tunebos, conocido actualmente como el pueblo U’wa (que quiere decir “La Gente”) Los U’was, establecieron un continuo comercio con el interior del país y con otras tribus de la región. Dicho comercio estaba basado en productos agrícolas, lozas de barro, perlas, piedras preciosas y la caza. Todos estos productos se comercializaban mediante el sistema de trueque.

La población indígena se convierte entonces en la primera expresión de poblamiento del municipio, que se realizaba acorde con las condiciones ambientales del medio, esta ocupación se da también en la utilización de algunos puntos geográficos como centros ceremoniales y el desarrollo de pequeños cultivos algunos para la comercialización otros como cultivos de pancoger. Luego de la época indígena y durante el periodo colonizador Sácama era un punto estratégico ya que los extranjeros motivados por la búsqueda del tesoro de El Dorado, de esclavos para las minas y el establecimiento de las encomiendas en el interior del país buscaban cruzar la cordillera oriental, hacia los llanos, siendo esta zona uno de los pasos para llegar a este punto.

Según Acuerdo No. 018 del Septiembre 9 de 1996, el municipio de Sácama celebra su fundación los 8 de diciembre de cada año, conmemorando la fundación por el alemán, Jorge Spira en 1538. Esta es la segunda forma de ocupación, que abarca el periodo 1538 hasta 1880. Los españoles utilizaron este territorio para crear un sistema socio- económico de encomienda. En este periodo se intensificó la explotación de los recursos naturales y se crearon algunas zonas para el mantenimiento de animales y cultivos. El primer asentamiento se presume que haya estado localizado a orillas de las fuentes de sal sobre el río Casanare y posteriormente se ocuparon las zonas de mesetas pero sin una concentración de población considerable. Durante este periodo existió una estrecha relación económica y social con los pueblos vecinos de La Salina, Chita y Támara. Con la presencia de los Jesuitas en los llanos y con el sistema de ganadería y formación de hatos originalmente constituido por ellos, la región de Sácama se trasforma en un área de transito de ganados. Es muy probable también que en este punto se hallan construido cercas de piedra para adecuar potreros y zonas de engorde de ganado para ser posteriormente llevados al interior del país. Es de anotar que las series de cercas de piedra que aún hoy día se pueden apreciar tengan un origen colonial y los habitantes contemporáneos las han conservado dándoles el mismo uso que se les dio en el pasado.

Pasada la expulsión de los Jesuitas y la intensificación de los conflictos civiles del siglo XIX, esta región entra en decaimiento y abandono, hasta el punto de considerarse todos los terrenos como baldíos. Con esta característica se presenta la tercera forma de ocupación adelantada por los colonos y campesinos de Boyacá, de personas de origen chitano y del norte de Boyacá. Esta ocupación aumentó la utilización del territorio para facilitar el desarrollo del comercio entre el interior del país y los llanos, estableciéndose en estos lugares rutas de arriería y de tránsito de mulas y animales de carga. Los primeros habitantes de esta región derivaron el transporte de productos y de esta manera mantuvieron una comunicación entre Arauca, Boyacá y Santander, también entre algunos pueblos de Casanare como Hato Corozal, Támara y Paz de Ariporo con Boyacá comercio constituido por el café y otros productos agrícolas. Solo hasta 1916 se tiene referencia escrita de la construcción de las primeras casas de lo que sería la cabecera urbana, cuando comenzaron a construir sus casa lo señores Antonio Báez, Felipe Antolines, Marques Mantilla y Felipe Benitez, todos ellos agricultores que cultivaban sus productos y luego los comercializaban en Boyacá. Luego de un tiempo estos pequeños agricultores reunieron capital suficiente para construir hornos en Muneque para procesar la sal.

MUNICIPIO DE SACAMA CASANARE



Sácama es uno de los 19 municipios del departamento de Casanare. Su jurisdicción tiene una extensión total de 537 km² y una población total de 1.706 habitantes. Se encuentra a 1.250 msnm, presentando temperaturas entre 18 y 20 ºC. Dista de Yopal (la capital departamental) 201 km y de Bogotá, 561 km.

ECONOMIA

El municipio de Sácama depende económicamente de la agricultura y la ganadería, aunque tiene una reservas de sal aún sin explotar.



DIVISION POLITICO-ADMINISTRATIVA
Sácama se compone de dos barrios en su casco urbano, ocho veredas y un resguardo indígena:

CASCO URBANO

Centro

La bañadera

Los Mangos

Villa Carola

VEREDAS
El sinai

Guivarin

La casirva

La colorada

Macueque

Monteolivo

Quebradanegra

Sabanalarga

RESGUARDO INDIGENA

Barro Negro



El municipio geológicamente se encuentra en rocas pertenecientes a la parte baja de la secuencia sedimentaria de unos 7.5000 metros de espesor de la Sierra Nevada del Cocuy. Esta secuencia se divide en tres sectores: el primero al oeste de la falla de Chiscas, el segundo entre la falla de Chiscas y la falla de Sácama y el último al este de la falla de Sácama. El municipio se encuentra casi en su totalidad al este de la falla de Sácama donde predomina las formaciones areniscas de las Juntas, Lutitas de Macanal, y algunos depósitos recientes del Cuaternario.
El municipio de Sácama se encuentra ubicado al Noroccidente del Departamento de Casanare en la Cordillera Oriental, a los 606´07” de Latitud Norte y a 720 15´12” de Longitud Oeste.

Norte: Arauca
Sur: Támara
Oriente: Hato Corozal
Occidente: Boyacá y la Salina.

Limite oficial: La definición del límite oficial se tomó de lo establecido en el DECRETO 870 DE 1974 (Mayo 18), Por el cual se fijan los límites de los diferentes municipios en que se divide la intendencia de Casanare, convertida hoy día en departamento:

Con el Municipio de HATO COROZAL. Partiendo del Cerro Manare, donde se encuentra el vértice geodésico denominado “Manare 1136”, donde concurren los territorios de Hato Corozal, Paz de Ariporo, Támara y Sácama, se sigue por la mayor elevación de la cuchilla hasta el nacimiento de la Quebrada Casirbita en el Alto El Tunebo; se continúa por la Quebrada Casirbita hasta su desembocadura en el Río Casanare, donde concurren los territorios de Hato Corozal y Sácama en el límite con la intendencia de Arauca.

Con el Municipio de TAMARA. Partiendo del cerro Manare (vértice geodésico “Manare1136”) donde concurren los territorios de Sácama, Hato Corozal, Támara y Paz de Ariporo, se sigue el filo de la cuchilla que separa las vertientes del Río Casanare y el Río Ariporo, pasando por el Alto El Masato y el Cerro El Llorón hasta el Alto de Aguablanca, situado en la Cuchilla del mismo nombre; se continúa por la Cuchilla de Aguablanca hasta el vértice geodésico número 547 y de este al Cerro Vanegas, donde concurren los territorios de Sácama y Támara en el límite con el Departamento de Boyacá.
Con el Municipio de LA SALINA. Partiendo de la desembocadura de la Quebrada El Mirador en el Río Casanare, donde concurren los municipios de La Salina y Sácama en el límite con la Intendencia de Arauca, se sigue la Quebrada El Mirador hasta su nacimiento en el Alto El Mirador; se continúa en dirección Sudeste (SW) hasta el Alto Las Lajas y finalmente al Alto El Poleo donde concurren los territorios de La Salina y Sácama en el límite con el Departamento de Boyacá.